La joven Tiziana Cantone desconocía que las imágenes filmadas por su amante en una noche de pasión terminarían publicadas en las redes sociales, donde fue masacrada con burlas e insultos. Tanta presión la llevó a la peor de las decisiones.
Tiziana Cantone, 31 años, parecía una modelo y tenía miles de seguidores pero nada hacía pensar que el escándalo en el que estaba metida la llevaría a quitarse la vida en su casa de Mugnano (provincia de Nápoles), donde vivía con su madre.
Todo comenzó cuando una noche dejó que su amante grabara un video mientras mantenían relaciones sexuales en un auto, pero sin ninguna intención de que esas imágenes se hicieran públicas.
Según informan medios italianos, el video se subió a internet convirtiéndose en muy poco tiempo en uno viral, con su nombre y apellido a la vista de todos. El video se acompañaba de una frase: “¿Estás grabando un video? ¡Bravo!” Es decir, mismas las palabras que Tiziana Cantone pronunció a su compañero, y que media Italia conocía.
Las redes sociales se llenaron de burlas, parodias e insultos hacia Tiziana, que no pudo soportar la vergüenza. Incluso futbolistas de la primera división italiana hicieron bromas sobre Tiziana Cantone, burlas que acabaron en YouTube y en sitios pornográficos. Algunas televisiones locales hicieron servicios en las calles de Nápoles, preguntando a la gente: “¿Conoce Tiziana Cantone, la del video hard?”.
La joven inició una batalla legal para que el video fuera retirado de la web. Su abogada, Roberta Foglia Manzillo, citó a juicio a Facebook, Yahoo, Google y YouTube, obligando el juez a algunas redes, como Facebook, a que se retirara el video y comentarios, así como al pago de los gastos por una cifra de 320 euros.
Pero, por otro lado, Tiziana había sido condenada a pagar los gastos legales a cinco páginas web por valor de unos 20.000 euros. El daño estaba consumado: Aunque la joven había iniciado el procedimiento para cambiar incluso de apellido, la gran difusión de las imágenes y de su foto representaba una herida insanable.
Llegó a intentar un suicidio con barbitúricos, del que fue salvada por la madre. Pero el peso de la vergüenza, la angustia insostenible y la depresión la llevaron el martes al trágico final, según informa el diario Abc de España.