Encuentra la causa y selecciona el tratamiento adecuado para ti
Al mencionar la palabra calvicie las personas tiendan a pensar que ese es un problema de los hombres. (Archivo / GFR Media)
Se estima que diariamente el ser humano pierde entre 50 y 100 hebras de cabello dejando espacio para que vuelva a crecer la misma cantidad, como parte del proceso natural de regeneración. Es cuando ese ciclo no vuelve a repetirse que comienza a verse un problema de pérdida de cabello.
Y, aunque al mencionar la palabra calvicie las personas tiendan a pensar que ese es un problema de los hombres, la realidad es que se trata de una situación que también experimentan las mujeres.
“Se estima que para los 50 años, el 50% de los hombres van a tener algún tipo de alopecia androgenética o la calvicie asociada a la genética o a las hormonas. En el caso de las mujeres es un 40% pueden experimentar afinamiento y la pérdida gradual de volumen para los 50 años”, afirma el dermatólogo Luis Ortiz Espinosa.
Mientras que el cirujano plástico Edgar Reyes deja a un lado el mito de que la calvicie se transmite a través de los genes de la madre para establecer que se trata de una condición que puede heredarse también del padre.
“La alopecia es una situación bien común que viene del padre y de la madre, pero es una herencia dominante, por lo tanto cada vez más lo vas a ver. En las damas es muy común en periodos de cambio hormonal. En los caballeros también es común y aunque algunos deciden seguir la moda de afeitarse toda la cabeza, sigue siendo psicológicamente fuerte. Puede causar un gran daño emocional porque se comparan con sus pares de la misma edad”, explica Reyes.
Para entender la caída del cabello primero hay que conocer sus tres fases de vida, aseguran ambos expertos.
A la primera fase se le conoce como anafase o etapa de crecimiento. Ortiz Espinosa indica que alrededor del 85% de los cabellos que están en el cuero cabelludo se encuentran en esa etapa. Luego el pelo entra en un corto periodo de reposo al que se le llama catagen, para entonces pasar a la etapa denominada telogen, que es en la que ocurre la caída.
“En la etapa de telogen el pelo se separa de la papila y va a caer. La proporción es que de cada 100 pelos que tenemos, 85 están creciendo en anagen y un 15% están en telogen. Por eso todos los días se nos caen de 50 a 100 pelos porque se tiene que caer no porque haya un problema de calvicie”, asegura Ortiz Espinosa, director médico de NovaDerm en Bayamón y Carolina.
No obstante, se trata de un problema complejo que puede tener diversas causas y muchos tipos de tratamientos.
Más de una causa
La alopecia es un problema que puede tener una gran variedad de causas que se manifiestan de diversas maneras, y que a su vez pueden variar entre hombres y mujeres. “No necesariamente se va a ver una calva en un área localizada, puede ser pérdida de pelo”, comenta Ortiz Espinosa.
1. Por lo general, la caída de pelo más común que afecta a hombres y a mujeres es la caída de pelo del tipo androgenético o hereditario hormonal, que está ligada a la herencia y a la genética de las personas.
2. Otra causa muy común es la lluvia de pelo causada por estrés físico, mental o emocional. El dermatólogo explica que el estrés físico puede ser a consecuencia de una cirugía, un accidente o trauma, una medicina, una dieta desbalanceada, un virus como el dengue o el Zika, un embarazo o problemas hormonales. También están las causas mentales o emocionales entre las que hay que mencionar el estrés y la depresión. “Bajo estas circunstancias, a veces el pelo se sale de fase. En telogen empiezan a estar hasta un 30% del pelo y eso hace que la persona comience a tener una disminución notable de pelo. Esta caída de pelo es transitoria y puede durar varios meses en lo que se regulan esas condiciones físicas o emocionales. Luego vuelve a lo normal. Esta es una caída de cabello bien común. Tiene muchas causas pero casi nunca hace que aparezca una calva, sino que la persona se queda con poco pelo”, explica Ortiz Espinosa.
3. Mientras la alopecia areata puede convertirse en alopecia generalizada y en otros casos alopecia universal donde se cae el pelo de todo el cuerpo debido a condiciones autoinmunes con unos factores que no siempre se pueden controlar.
4. Hay desórdenes de inflamación causados por hongos o por condiciones inmunes que afectan el cuero cabelludo que pueden desencadenar problemas de alopecia. El dermatólogo mencionó el lupus como una de estas condiciones autoinmunes y también el “liquens plano pilaris”, que ahora se está diagnosticando más y se cree que pueda ser causada por el ambiente o en la alimentación. “Esta condición hace que se caiga el pelo en el área frontal con un poco de inflamación, contrario a la alopecia androgenética que no presenta inflamación. En este caso especialmente son mujeres y la vas a ver como si fuera pelo de muñeca, se le cae pelo, le queda alguno pero se ven os folículos inflamados, mayormente en la parte frontal”, añade Ortiz Espinosa.
5. La alopecia por tracción ocurre cuando la persona se hala mucho el cabello con tal fuerza que éste empieza a caerse. “Algunas personas tienen un problema que se llama tricotilomanía que es que se halan el pelo, se lo arrancan o se lo parten. No es una enfermedad física sino una emocional”, explica el dermatólogo.
6. El tratamiento de quimioterapia puede ser otra causa de alopecia temporera pues destruye el folículo cuando el vello se encuentra en etapa de anagen. Ortiz Espinosa menciona que en esa fase de crecimiento del cabello hay una duplicación celular bien acelerada. Por eso es que el agente quimioterapeuta que va dirigido a matar las células que se están duplicando por el cáncer, ataca las células del folículo y la papila del pelo y las dañan temporeramente. Pero tan pronto deja la quimioterapia, vuelve el pelo. No es una pérdida permanente.
Cómo tratar el problema
Actualmente en el mercado hay una gran variedad de tratamientos que atacan a los diversos tipos de alopecia, tanto en mujeres como en hombres. Tanto Ortiz Espinosa como Reyes destacan que hay tratamientos que pueden usar hombres y mujeres por igual y otros no. A continuación, conoce un poco más sobre las alternativas disponibles en el mercado.
La alopecia androgenética se puede tratar de diferentes maneras. Para ambos sexos se recomiendan productos tópicos como a base de minoxidil, como es el Rogaine y el Anargen Anafase.
Reyes señala que para la alopecia androgénica desde hace cerca de dos décadas a estos productos se unió el Finasteride, pero solo para los caballeros, pues trabaja con los niveles de testosterona y de dihidrotestosterona, que es la deformación de la testosterona. “La dihidrotestosterona es lo que causa que se nos caiga el cabello y también causa que la próstata se engrandezca. Esta droga llamada Finasteride comenzó como un medicamento para la próstata pero rápidamente vieron que además de mejorar condiciones de este órgano también hacía que el cabello no se cayera y los que estaban perdiendo pelo comenzó a crecerle”, menciona el director médico de Cosmetic & Hair Surgery Center en Bayamón. Ambos expertos señalan que aunque en un momento se dijo que el consumo de Finasteride podía causar problemas de impotencia sexual, algunos estudios han demostrado que no es así. “Esa pastilla tiene una efectividad de un 85%, paraliza la pérdida y ves un crecimiento en el caballo pero toma entre uno y tres años para ver los efectos. Después tienen que seguir tomándola el resto de sus vidas”, dice Reyes.
También se utilizan champús que tienen un poco de esteroides que estimulan el crecimiento y disminuyen la inflamación. En el caso de la caída de pelo por estrés físico o emocional se utilizan esos productos además de suplementos vitamínicos a base de biotina, destaca Ortiz Espinosa.
En muchos casos cuando tiene alopecia areata, que tiene esas “calvitas”, se inyecta directamente en el área un producto a base de cortisona que reduce la reacción alérgica que se está experimentando y que está atacando el folículo. “ La cortisona disminuye esa reacción y hace que se vayan las células que atacan al folículo y empieza a crecer el pelo de nuevo”, menciona el dermatólogo.
La luz infrarroja es otro tratamiento que lleva en el mercado hace poco más de una década y su fin es estimular el crecimiento. Reyes señala que ese láser actúa a nivel de tejido para que ese cabello que se estaba miniaturizando crezca más fuerte. Este tratamiento puede utilizarse a la par con las pastillas, en el caso de los hombres.
El trasplante de cabello es una opción efectiva, pero costosa y a la vez invasiva. Reyes explica que hay dos tipos, uno que se saca una tira completa que se coloca en el área y otro en el que se injerta pelo a pelo en cada folículo. “Es un procedimiento que se hace con anestesia, el paciente está semisedado y no duele. Las damas también son candidatas al injerto. Ese cabello se cae temporeramente a los dos meses y luego comienza a crecer. Una vez esté en su lugar, puedes cortarlo o teñirlo como desees”, añade Reyes.
Lo más novedoso en el mercado es el uso del plasma rico en plaquetas para tratar la alopecia. El cirujano plástico explica que para realizar este tratamiento se extrae el plasma de la misma sangre de la persona y se inyecta superficialmente a nivel subcutáneo, específicamente en el área donde están la grasa y las raíces del cabello en el cuero cabelludo. “Cuando inyectas el plasma rico en plaquetas estas activando las células madre y el tejido a repararse. En ese cabello que está en una etapa de caída, se reactiva el folículo”, establece el cirujano plástico.