La alimentación es lo más importante de nuestra vida, ya que mediante esta no solo nos nutrimos y ganamos energía.
Sino que también es el medio por el que nuestro cuerpo absorbe las propiedades para potenciar y realizar ciertas funciones.
Sin embargo, hay que tener en claro que no siempre tenemos una alimentación saludable y balanceada, sino que comemos mucha comida chatarra, gaseosas, bebidas alcohólicas y golosinas. ¿Qué pasa en este caso? De igual forma absorbemos las propiedades de estos alimentos, pero en este caso no se trata de propiedades beneficiosas sino todo lo contrario.
Para entender mejor el caso debemos poner un ejemplo que nos ilustre: cuando comemos una ensalada esta se digiere en solo una hora, pero cuando comemos una hamburguesa.
Esta puede durar hasta tres días en nuestro organismo para que sea procesada por completo y al final, de igual forma, quedan residuos en nuestro interior sin ser procesados.
Con este remedio natural puedes eliminar las piedras de la vesícula
Así bien, cuando comemos más y más comida chatarra o sus similares, estaremos dejando una gran cantidad de residuos en nuestro organismo y a la larga estos afectan a los procesos naturales de los órganos, entorpeciéndolos o dañándolos por completo.
Uno de los principales problemas que se pueden desarrollar en este sentido es la aparición de piedras o cálculos, estos pueden aparecer en la vesícula, en los riñones o hasta en el hígado dependiendo de varios factores.
Para eliminar estas piedras podemos usar un remedio natural, el cual te enseñaremos a continuación:
Ingredientes:
4 cucharadas de sales Epson.
1 pomelo o toronja grande.
½ taza de aceite de oliva.
Procedimiento y uso:
Mezcla la sal en tres tazas de agua, separa esta preparación en tres partes iguales, aparte mezcla el aceite de oliva con el jugo de toronja. Refrigera cada una de las preparaciones.
A las 6 de la tarde deberás tomar la primera Porción de agua y sal, luego, a las 8 de la noche el segundo vaso. A las 10 p.m. justo antes de dormir deberás ingerir el remedio de aceite y toronja.
Y, por último, a la mañana siguiente debes tomar la última porción del agua con sal.
Lleva este tratamiento con calma y bebe cada una de las preparaciones lentamente para evitar nauseas. Es normal que al día siguiente sientas ganas de vomitar o diarrea, esto es parte del proceso.