¿Se puede hablar de ponerle límites al amor? Seguramente no, si lo que queremos es hablar del amor de las novelas románticas, eterno y excluyente. Tampoco podremos ponerle límites si hablamos del amor de las tragedias griegas, dramático e irresistible.
Pero otra cosa sucede con el amor nuestro de cada día. El amor que verdaderamente somos capaces de sentir y el que esperamos que otros puedan sentir por nosotros. Para bien y para mal, ese amor no es ningún sentimiento sublime e ilimitado. No es, repito para dejarlo claro, no es una emoción reservada para unos pocos, ni tampoco algo que se siente exclusivamente en un momento de la vida frente a una única persona.
Jorge Bucay es un psicodramaturgo, terapeuta gestáltico y escritor argentino. Se define como “ayudador profesional” ya que, según él, mediante sus conferencias y sus libros procura ofrecer herramientas terapéuticas, para que cada quien sea capaz de sanarse a sí mismo. Por su parte, en su país natal, Argentina, es considerado uno de los mejores de la psicología actual.
“Yo trabajo sobre la idea aduéñate de tu vida, lo que tienes es tu responsabilidad. Creo que el mundo no es un lugar para competir, sino para compartir, y una condición necesaria es mirarse a uno mismo” . Jorge Bucay