Constanemente nos llenamos de enfermedades y es que resulta inevitable por las grandes contaminaciones en la que nos encontramos rodeados, o que sencillamente sufrimos de una leve enfermedad pero por asuntos hereditarios. Por ello hoy te hablaremos de los beneficios de la hoja de laurel.
Hoy en día padecer de algún malestar puede resultar hasta ser un lujo ya que los medicamentos pueden parecer ser muy costosos y no todos tienen la facilidad de acceder a ellos, y para poder solucionar terminamos acudiendo a los tratamientos naturales que podrían ser hasta inclusive mucho mejor que los farmacéuticos.
Nosotros te presentaremos los beneficios de una planta que sueles utilizar para darle los mejores sabores a tus comidas principales pero lo que no sabías es que esa planta también lo puedes utilizar para sanarte de muchos males.
EL LAUREL Y SUS BENEFICIOS PARA NUESTRO ORGANISMO
Beneficios
- Es perfecto para acabar con el agotamiento o la falta de energía.
- Lagunas mentales
- Cistitis
- Calambres en los músculos
- Síntomas premenstruales
- Cafaleas y hasta migrañas
- Artritis
- Depresión
- Afecciones del nervio ciático
- Infecciones cutáneas
- Debilidad en los músculos
- Uretritis
- Distensión abdominal y flatulencias
- Retención de líquidos
- Ronquidos o apneas
- Otitis
- Contracturas en los músculos
Si quieres acabar con la molesta gripe y el expectorante bronquial esta sería la mejor solución para ti, asimismo también estarías estimulando la digestión y mejorando la circulación, es totalmente diurético, antirreumático y antibiótico.
El aceite de su hoja puedes utilizarlo de distintas maneras para purificar el ambiente e inclusive como repelente de insectos, es perfecto para alejar las malas energías y despejar la mente. También ayuda al drenaje linfático, ayuda a combatir la retención de líquidos y la pesadez.
Si tu niño se encuentra en una crisis de pánico, llanto o vomitos te recomendamos añadir tres gotas de aceite en el difusor y si no sabes cómo preparar el aceite aquí mismo te lo explicaremos.
Ingredientes
250ml de aceite de almendras
30gramos de hojas secas de laurel
Preparación
Toma un recipiente y coloca las hojas junto con el aceite del almendras sumergiendo todas las hojas y deja reposar en un lugar fresco lejos del sol durante 30 días y luego agita. También puedes colocar a hervir 200ml de agua agregando las hojas hasta que se encuentre en el punto de ebullición, deja reposar por 10 minutos, retira las hojas e ingiere.